Desarrollada en Francia hace aproximadamente 50 años, la mesoterapia es considerada en todo el mundo como un tratamiento altamente efectivo para distintas patologías.

La técnica de la mesoterapia consiste fundamentalmente en la administración de sustancias   mediante múltiples infiltraciones a nivel intradérmico.

Este sistema permite movilizar y disolver la grasa acumulada y la celulitis que no desaparece con el ejercicio.

Además, gracias a su aplicación se consigue activar la microcirculación de la zona a nivel arterial, venoso y linfático, por lo que se regenera el tejido y se promueve la eliminación de líquidos y toxinas.

La acumulación de grasa localizada y celulitis son problemas estéticos muy frecuentes. Los factores desencadenantes de la celulitis son múltiples y variados como la herencia genética, los problemas hormonales, los hábitos de vida poco saludables (exceso de alcohol y tabaco), sedentarismo, estrés, …..

En general, los resultados de la mesoterapia son muy positivos, ya que los productos empleados en las infiltraciones actúan directamente sobre la celulitis de la zona objetivo, en el tejido adiposo.

Tras el tratamiento de mesoterapia  existe la posibilidad de que se produzcan pequeños hematomas que desaparecerán a los pocos días.

La mesoterapia es una técnica un tanto molesta pero no dolorosa , son necesarias al menos 10 sesiones para obtener resultados evidentes.

Una de las ventajas más significativas de la mesoterapia es que, además de obtener notables resultados sobre la celulitis, la duración de las sesiones resulta breve y sencilla.

Solemos completar la sesión con drenaje linfático mecanico (presoterapia) y plataforma oscilante.

No conviene tomar el sol después del tratamiento de mesoterapia puesto que se pueden producir pigmentaciones.